...las cosas no son lo que parecen.
...no hay que confiar en alguien tan rápido.
... las personas a las que consideras tu verdadera familia son las únicas que siempre están contigo.
...después de una prolongada y dolorosa discusión te das cuenta de lo que significa para ti aquella persona.
...A no oír a alguien más que no sea mi corazón.
...el tiempo no es la cura para todo.
...la gente no te comprende hasta sentir lo que tu hayas sentido.
...un sueño verdadero está en ti a pesar de las adversidades y a pesar de que lo creas perdido.
...el mejor cumplido es el que se hace para uno mismo.
...hay que aprovechar los momentos de inspiración.
...es mejor tragarse el orgullo que tragarse los recuerdos.
...no hay que dejar que moldeen tu mente.
Y, más que todo...
He aprendido a se fuerte, para levantarme en cada caída, para confiar más en mí y no dejar que lo exterior me afecte y para ir consiguiendo la satisfacción de saber que no has desperdiciado tu vida yendo en contra tuya.
Emotivos
... y aquí están las emociones que se convirtieron en palabras porque no sabía como expresarlas o simplemente no podía hacerlo.
Como un esclavo que lanza un grito de libertad cuando logra escapar de su cautiverio.
Como una oruga que sale majestuosa de su capullo convertida en mariposa.
Como las olas atraídas por la luna buscando llamar la atención.
Y como cuando uso las cadenas de mi corazón y mi mente para atar ideas con otras formando una barrera dulce, segura pero impenetrable.
lunes, 26 de diciembre de 2011
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Entendí que no puedo cambiar el mundo, pero también que el mundo no puede cambiarme a mí
Vivimos en un laberinto, donde buscamos encontrarnos a nosotros mismos perdiéndonos constantemente
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